Happening
Aprovechando que los padres se habían retirado por unas horas, el niño Carlos Olledo organizó en su residencia un “happening” que duró hasta altas horas de la tarde. Asistió lo más selecto de la cuadra.
El dueño de casa lució unos preciosos pantalones que la concurrencia sospechó eran de su padre. La cosa resultó de lo más divertida, porque como ninguno sabía que había que hacer un “happening”, el niño Jorge Iturralde se comió un peine con dulce de leche. La niña Aída López se dedicó a remontar canarios con hilo de coser. El niño Víctor Sueiro hizo un precioso mural con betún. El niño Estanislao Platt se metió en el lavarropas y todavía lo están queriendo sacar. La niña Etelvina Míguez hizo dos preciosos felpudos con las cortinas del living. La niña Julia Paredes le puso salsa de tomate a los libros  de derecho del dueño de casa, y Carlitos Olledo le sacó las patas a la mesa del comedor para jugar un partido de béisbol.
Los padres de estas criaturas, que por su edad no entienden de “happenings”, tomaron medidas de represión.
Carlitos Olledo ha enviado una cartita a Marta Minujín para que le explique dónde estuvo la falla.