En los tiempos inseguros e inestables en plan económico que hoy estamos viviendo es bueno tener un recurso de dinero extra que no requiera mucho tiempo y esté relacionado con algo que te apasione.
Para muchas personas jóvenes este recurso son las apuestas deportivas. Desde luego, no referimos a las apuestas en línea, puesto que son más cómodas y accesibles, sobre todo, cuando no sabes si vas a poder salir de tu casa mañana o habrá cuarentena.
Nadie nace con los conocimientos y las habilidades especiales que supone esta actividad virtual beneficiosa, por lo cual muchos usuarios recurren a artículos y reseñas de las casas de apuestas que abundan en la red hoy.
Desde luego, no todas estas revisiones son de fiar, pero las que escribe Miguel Torres, nuestro invitado, son profesionales y muy útiles hasta para los apostadores experimentados.
La verdad es que es un placer estar aquí y responder a las preguntas sobre la pasión más grande de mi vida.
Efectivamente. En los últimos cinco o seis años estoy demasiado ocupado escribiendo textos que no tengo tiempo para otras pasiones, más convencionales.
Mira, no tardo mucho en escribir el propio texto, pero el problema es que éste es el paso final de todo el trabajo. Antes de ponerme a escribir, necesito llevar a cabo una gran investigación. Es decir, comprobar si el legal, fiable y transparente una casa de apuestas, qué opiniones sobre sus servicios hay en la red. Además, pongo a prueba todas las funciones por mi propia cuenta para hacer el análisis más objetivo y detallado posible.
Depende. A veces me dan el dinero extra para invertirlo en las apuestas, a veces uso mis propios recursos. Y no tengo ningún problema con esto. Me gusta analizar plataformas y aplicaciones nuevas, me encanta apostar.
La verdad es que no me acuerdo bien del cuándo lo empecé. Creo que tenía unos 19 años. Descubrí esta actividad por pura casualidad. Durante la Copa Mundial de 2006 mi ex-novia me propuso probar la suerte y apostar en el encuentro final entre Italia y Francia. Aposté en la victoria de los italianos y el mes siguiente nos fuimos de vacaciones a Roma. Evidentemente, una manera de ganar el dinero igual de fácil me gustó mucho. Bueno, con el tiempo descubrí que no era tan fácil, como había pensado, pero es otra historia.
Desde luego. Por más trucos y estrategias que conozca, el resultado depende de la todopoderosa Fortuna.
Creo que has respondido a tu propia pregunta, ja-ja-ja. Pero no creas que lo he pagado todo con mis premios del apostador. Ayudaron mucho, pero el recurso principal del dinero han sido mis trabajos.
Bueno, cinco o siete, creo. Algunos trabajos son permanentes, como el del redactor en ApuestaDeportiva24 Perú, pero la mayoría son temporales. Así que, algunos contratos terminan y luego llegan nuevas ofertas.
¿Te refieres a la escritura? Bueno, no lo llamaría un don, prefiero llamarlo hobby. Empecé a escribir en el colegio, me gustó y decidí estudiar el Periodismo en la universidad. Quería escribir sobre el fútbol en una revista de deportes. Como ves, los sueños se cumplen al fin y al cabo, pero con algunas alteraciones. Pero no me puedo quejar.
Prefiero compajinar las dos cosas. No podría renunciar a mi afición y escribir textos en una isla caribeña sería genial.
¡Gracias a ti!