(Buenos Aires, 1928) presentó su primera exposición individual en septiembre de 1958, en la Galería Galatea, con el título Texturas. Era una serie de óleos, con conjuntos de pequeñas formas rectangulares, más o menos irregulares, pintados con espátula y abundante materia texturada. Con estos trabajos se inclinaba hacia la abstracción libre. En las exposiciones del Movimiento Informalista, un año más tarde, presentó unas telas típicamente informalistas, con gruesas estratificaciones de materia, surcadas de signos y graffiti. En 1960 expuso en la Galería Pizarro. Presentó un grupo de obras con empastes de calidades diversas (asperezas, rugosidades, tersuras), surcados de grafismos espontáneos, de grumos y goteados. En ningún caso la materia es excesiva, las gamas cromáticas son de gran restricción; abundan los negros, los betunes y los pardos. Es una expresión informal contenida, con cierta tendencia hacia el refinamiento. Con una obra de esta serie, obtuvo la Faja de Honor del Premio Ver y Estimar en 1960.
En el Premio Nacional del Instituto Di Tella, el jurado, que integraban Romero Brest y el italiano Lionello Venturi, le otorgó la máxima recompensa para artista nacional por De Profundis, un tríptico de grandes dimensiones. En julio de 1961 presentó un conjunto de pinturas en la Galería Bonino. En las obras exhibidas continuaba valiéndose de la materia, sumando a los accidentes superficiales, a las texturas, telas