El Juicio Final. Composición (díptico), 1964
El sueño de Úrsula (La corona del martirio), 1968
pequeñas escenas con personajes que interactúan entre sí –ángeles, por ejemplo–, realizados en papeles claros. El conjunto parece inspirarse en los relieves narrativos tallados en los portales de antiguas iglesias.
Volvió a tratar temas de las Escrituras en series presentadas en muestras posteriores, como los collages dedicados al Éxodo, entre los que se encuentra
En el monte Sinaí (1965), donde reitera el procedimiento del papel rasgado y plegado, que sumado a la aplicación de pintura en forma de manchas y un esquema compositivo dinámico, relaciona a esta pieza con el expresionismo matérico que por entonces transitaba, período al que pertenecen también el libro
Los Macabeos,
y las obras que tratan la historia de Adán y Eva.
La leyenda de Santa Úrsula, de la que alguna vez Yente comenzó a hacer un libro ilustrado, es resumida en unos pocos trabajos efectuados en 1968, en los que utilizó fotografías recortadas de revistas de actualidad, combinándolas, en atractivo contrapunto, con ilustraciones de obras de arte, seguramente también tomadas de publicaciones periódicas.
El collage fue una técnica que exploró largamente y con la que asumió distintas modalidades y temáticas en las dos décadas siguientes, fuera para fijar remembranzas familiares, como en sus Retratos recuerdo,
o para dar cuenta de preocupaciones que le imponían los tiempos convulsionados que le tocó vivir.