diferentes disciplinas como pintura, escultura, instalaciones, videos, música, performances y teatro, estaba dedicada a Batato Barea que había fallecido el 6 de diciembre. El proyecto original nace a mediados de 1989 en una reunión informal en el bar Bolivia entre Liliana Maresca, Marcia Schvartz y Elba Bairon. La muestra se acompaña de textos de Fabián Lebenglik, quien comenta que:
“[...] En sucesivos encuentros a los que se fueron sumando más artistas amigos surgió la idea de un proyecto alrededor de la conquista de América, considerado un tema polémico y abierto [...]”
La exposición se lleva a cabo con fallidas promesas de financiamiento y muchos problemas en el montaje, como un sostenido corte de energía eléctrica cuarenta y ocho horas antes del inicio. A pesar de varios impedimentos, se inaugura con la actuación de la comparsa Marí-Marí de Gualeguaychú, en las puertas del Centro Cultural.