Gyula Kosice
Planos y color liberados 1947
Martín Blaszko
Ritmos verticales, 1947
Grete Stern
Foromontaje Madí
Estos preceptos se encuentran en la serie de esculturas articuladas de Kosice, entre las que figura
Röyi de 1944, cuyas posibilidades de transformación son una invitación a la participación lúdica del espectador. Sus investigaciones con nuevos materiales, producto del desarrollo tecnológico, como el aluminio, el plexiglás o los tubos de neón,
así como el empleo de esmaltes sintéticos para pinturas-objeto, revelan una inquieta capacidad creativa que busca integrar el arte a las transformaciones del mundo contemporáneo.
Puede seguirse la evolución teórica y artística de los miembros del grupo a través de la revista
Madí, así como las actividades musicales, poéticas y plásticas allí anunciadas. El N° 2 consigna la participación de Madí en el
Salon de Réalités Nouvelles en París, muestra de arte no-figurativo con 260 expositores en representación de 17 países. Encabezado por Kosice y Rothfuss, el envío causó fuerte impresión en la crítica. Pierre Descargues afirma que estas obras señalan “[…] un momento de estallido de la pintura. El arte rompe los cuadros de cuatro ángulos rectos. Es brutal, bárbaro, insolente, totalmente nuevo. Se escuchó decir el otro día, frente a estos cuadros novedosos: ‘¡Pero este es el arte indio, aquí se siente la pampa!’. Bajo la broma se oculta el homenaje a una fuerza arrogante, pero presente, torpe todavía, pero simpática. […] Están casi orgullosos de su estilo. Buscan salir de la oscuridad y dar furiosas patadas en las reglas de la abstracción. Se puede amar a una juventud como ésta”.
También en el N° 2 aparece el famoso fotomontaje de Grete Stern. La imagen muestra la plaza del Obelisco, lugar emblemático del centro de Buenos Aires, sobre la que se superpone, extraída de un cartel luminoso, una gran “M” que encabeza la palabra “Madí”, completada por tres letras pintadas en el estilo monumental de la primera. La obra funciona como un reclame publicitario, donde el nombre del grupo se convierte en una marca que se destaca con potencia en la efervescente vida de la ciudad, sus edificios, las líneas geométricas del diseño moderno, el neón de los carteles, el tránsito, la continua transformación, a la que este arte desea contribuir.