Desde entonces, el recurso predomina en la serie de grabados dedicados a Ramona (Ramona obrera o Ramona en la calle, Ramona y el viejo).
Junto a Batlle Planas, Aizenberg, García Uriburu, Jorge López Anaya, Minujín, Seguí, Renart, Santantonín, Wells y Kemble, integra en la Galería Lirolay la muestra Collages, que conmemora el cincuentenario de la realización de los primeros collages cubistas.
En declaraciones a Michel Ragon, aparecidas en el semanario Arts de París (18 de diciembre de 1962), dice estar trabajando en Ramona Montiel, un personaje que ya había pensado en Buenos Aires. Estos collages se nutrirán de lo encontrado en el mercado de las pulgas, viejos vestidos de Folies-Bergère con lentejuelas y colores vivos, aptos para hacer de Ramona una “grande cocotte”.
Como reconocimiento por el premio obtenido en Venecia, el 23 de diciembre se lleva a cabo el Homenaje a Antonio Berni, demostración popular realizada en una carpa instalada en la Plaza Miserere (Teatro Arena) de Buenos Aires. En él participan artistas plásticos, críticos, galeristas, además de célebres músicos y actores del medio local.